

Ahora bien, me pregunto ¿cuántos YO tengo dentro mío? Uno que prepara mecánicamente los alimentos, otro evocando un suceso reciente, otro que escucha sin oír hasta que algo llamó su atención.
Según el neurocientífico norteamericano Paul MacLean el cerebro humano es triúnico, es decir está compuesto por tres cerebros: el cerebro reptiliano, el sistema límbico y el neocórtex.
No cabe duda que nuestro cerebro es uno de los sistemas más complejos que conocemos y si bien hoy en día la biología evolutiva y las neurociencias presentan dudas sobre algunas cuestiones de este modelo, vale la pena dedicarle unas líneas para saber de qué trata y como ha sido y es manipulado por algunos estamentos de este sistema socio económico.
La idea de Paul Mac Lean explica que en el encéfalo humano existen tres sistemas distintos, con sus propias reglas y que cada uno de ellos se formó en diferentes períodos evolutivos, lo cual explicaría que estos tres cerebros serían relativamente independientes y que se relacionarían siguiendo una jerarquía de acuerdo a su antigüedad y la importancia de sus funciones para nuestra supervivencia.
El complejo reptiliano, por ejemplo, por ser el más antiguo sería el responsable de las funciones más básicas y más importantes para la supervivencia. El sistema límbico que le sigue secuencialmente es el sitio donde se generan las emociones y la memoria, mientras que el neocórtex, de aparición más reciente en la línea evolutiva sería el que se encarga de las funciones más refinadas y complejas.
En el cerebro reptiliano aparecen conductas simples e impulsivas para la supervivencia inmediata: miedo, enojo, hambre, etc. Evalúa y según sus posibilidades opta por atacar o huir.
El sistema límbico, según Mac Lean apareció con los primeros mamíferos y es la estructura responsable de la aparición de la memoria y con ella las emociones asociadas a las experiencias vividas, si una conducta produce emociones agradables, tenderá a repetirla o a procurar los cambios para que se repita, mientras que si produce displacer evitará tener que experimentarla otra vez.
El neocórtex es el complejo evolutivo más reciente, en él reside la capacidad para aprender todos los matices de la realidad, planificar estrategias más complicadas y analizar sus propios actos.
Esta idea del triple cerebro es ampliamente conocida y utilizada en el territorio del marketing político; los intereses oscuros siempre se maquillan con discursos que se dirigen al cerebro reptiliano o al límbico y evitan completamente el discurso racional de la neo corteza. Veamos algunos ejemplos.
Cuando un comunicador lanza discursos del tipo: “el dinero que te sacan por impuestos se lo regalan a los vagos que no quieren trabajar o a las chiquilinas que se embarazan para cobrar la AUH” o bien “los extranjeros de los países limítrofes llegan para sacarle el trabajo a los compatriotas”. Le habla al cerebro del reptil que lo interpreta como una amenaza a su bienestar.
Cuando el responsable de campaña de un movimiento da directivas a los candidatos para que “hablen de su familia, cuenten anécdotas de sus hijos, hablen con metáforas coloridas, pero NO digan lo que van a hacer” está dirigiendo el discurso al cerebro límbico de la audiencia.
El neocórtex analiza, compara y saca conclusiones en consecuencia, por ejemplo: “éste reparte vacunas, aquel las deja vencer”, “éste tiene políticas de salud, aquel destruyó las existentes”, “aquel nos endeudó por 100 años, éste busca negociar la mejor salida del endeudamiento”. El neocórtex compara y analiza hechos y así se posesiona según las conclusiones apoyando a éste o aquel.
Aquellos evitan la lógica del cerebro racional, simplemente exaltan el instinto de atacar o huir, o despiertan emociones con cuentos amenazantes o historias seductoras. Las ideas más nefastas se promocionan de esta forma.
Contrariamente, un sistema que garantiza las condiciones básicas para la supervivencia como salud, vivienda, alimentación, resguardo de los adultos mayores; que permite el desarrollo de la solidaridad, las artes, las actividades recreativas; que involucra todos los recursos en la educación y la formación de los ciudadanos, contribuye a la paz y armonía de los “tres cerebros”.
Como puede verse, más allá de las fortalezas y debilidades del modelo Mac Lean del cerebro triple, parece poder brindar algunas explicaciones sobre nuestros comportamientos reptilianos, anímicos y del pensar.
Por José María Caracuel
Lic. En Ciencia Químicas (UBA)
Fitoterapeuta
Terapeuta Floral
Psicòlogo Holìstica
José María Caracuel reside actualmente en el Partido de La Costa y está dispuesto a aportar sus conocimientos en la materia, no sólo a través de nuestras páginas. Cualquier inquietud sobre estos temas, no dude en consultar a través del formulario de contacto (En la cabecera botón derecho).
A lo largo de casi 50 años de actuación profesional se desempeñó en la actividad privada, la docencia y el desarrollo de normas de los ámbitos nacional, Mercosur y Panamericano.
Colaboró en distintas publicaciones por ejemplo en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) y la Unión Industrial.
Publicó en total 10 libros tanto en el ámbito de ciencia y tecnología, como en el de la divulgación científica, entre los que se encuentran:
-Recopilación trilingüe de términos metalúrgicos y definiciones. Instituto Nacional de Tecnología Industrial. 1993
-Sistemas de Calidad. Su implementación. Cámara de Industria y Comercio de la Pcia. De Buenos Aires. 1998
-Diccionario trilingüe del Cobre. Instituto Nacional de Tecnología Industrial. 1999
-Pensamiento y Espiritualidad. Studio Gráfico. 2012
-Ciencia Espiritual y Ciencias Fácticas. Studio Gráfico. 2013
-Ciencia, Filosofía y Misticismo. Editorial Dunken. 2014
Su último libro 666 El último ataque de la bestia, fue presentado por videoconferencia en marzo de 2021 desde el Museo de Mar de Ajó