Por quinto día consecutivo, un grupo de trabajadores  de la salud mantiene un acampe en las puertas del Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Mar del Plata para exigirle al gobierno provincial, mejoras salariales y recategorizaciones. 

La medida de fuerza comenzó el lunes con un abrazo solidario al nosocomio por parte de enfermeras y enfermeros de la institución. Sin embargo, con el correr de las hora y los días, se sumaron más trabajadores de distintas áreas, e incluso, de otros centros de salud de la ciudad. 

Tras el aumento abrupto de casos y la llegada de la segunda ola, los enfermeros aseguraron estar “agotados” después de un año de luchar con la pandemia y “sin reconocimiento” por parte del Estado. 

Durante el acampe, aseguraron que su salario básico es de 35.000 pesos y que el monto no alcanza "para llegar a fin de mes". Frente a medios locales, una trabajadora aseguró que deben tener dos empleos "para armar un sueldo". 

Los trabajadores que llevan adelante el reclamo denunciaron que trabajan en “malas condiciones” y  falta de personal, especialmente para hacer frente a este aumento de contagios de Covid-19.

De esta manera, el reclamo que empezó como una protesta del sector de enfermería, se amplió y sumó a los trabajadores de Terapia Intensiva, Rayos, Camilleros, Hemoterapia, Unidad Renal, Salud Mental, Limpieza y el Lavadero, entre otras áreas. También se solidarizaron representantes del Hospital Materno Infantil, de la UPA, la Central de Trabajadores Argentinos, el Espacio Sindical de Base y otras organizaciones sociales de Mar del Plata.

Todos ellos, reclaman al gobierno bonaerense un “sueldo digno”, un bono, recategorizaciones y el pase a planta permanente de varios trabajadores. Quienes sostienen la medida aclararon que “la tarea en el Hospital no se interrumpió” y que “los servicios están cubiertos”,  a pesar de la protesta.

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