

El rescate ocurrió en la zona de Playa Grande de San Clemente del Tuyú, luego de un aviso de una turista que encontró al animal varado. Los especialistas detectaron que la herida, probablemente causada por un elemento cortante como un zuncho plástico o artículos de pesca, comprometía su bienestar.
Después de casi un mes de cuidados y rehabilitación, el lobito marino pudo ser devuelto a su hábitat natural, completando con éxito su recuperación. Desde la Fundación Mundo Marino recordaron la importancia de mantener las playas limpias y evitar residuos que puedan afectar a la fauna marina.