Isabel Suárez, madre de Darío Jerez, falleció este sábado  dejando un vacío profundo en la comunidad que ha compartido su dolor y su lucha durante más de dos décadas. Su partida ha conmocionado a todos aquellos que conocieron su historia y su incansable búsqueda de justicia por su hijo.

En un comunicado publicado por Memoria Activa, se expresó que Isabel “murió en paz, convencida de que tras abandonar este plano volvería a reencontrarse con su hijo. Los responsables de la desaparición y muerte de Darío no lograron su cometido, porque él está vivo en cada uno de aquellos que lo conocieron”. La emotiva carta también señala que “así de vivo permaneció en el corazón de Isabel, hasta su último suspiro. Suspiro que nos empuja a seguir luchando, a seguir reclamando por Memoria, Verdad y Justicia”.

El comunicado concluye con una promesa: “Isabel seguirá marchando junto a nosotros cada 25 de Octubre, como lo hizo en esta foto que ilustra su fortaleza. Ya no la veremos, pero estará”. Este mensaje refleja el compromiso de Isabel con la causa, que ha marcado una huella imborrable en la lucha por justicia.

Darío Jerez desapareció en octubre de 2001 mientras trabajaba como corredor para la firma Arcor. Su desaparición, que se convirtió en uno de los enigmas más profundos de la región, nunca ha sido resuelta, y la búsqueda de respuestas continúa siendo un símbolo de la lucha de su madre y de quienes buscan justicia.

Isabel Suárez, con su valentía y determinación, ha dejado un legado duradero en la comunidad, y su memoria seguirá viva en la lucha por justicia y en el corazón de quienes compartieron su dolor y su esperanza.