En las primeras horas de este jueves, la policía detuvo en la terminal de Santa Clara del Mar a Juan Galarregui, el hombre de 56 años que era intensamente buscado como el principal sospechoso del femicidio de Rocío Fernández, la joven que había desaparecido el sábado en Mar del Plata.

Según informó el diario La Capital de Mar del Plata, Galarregui fue interceptado por los efectivos cuando se disponía a abordar un colectivo con destino a la ciudad de Buenos Aires. Al ser interrogado, intentó eludir a la justicia exhibiendo un documento de identidad que pertenecía a otra persona de sexo masculino, con características físicas similares. Sin embargo, los agentes lograron identificarlo gracias a varias señas y tatuajes en su cuerpo.

El fiscal Fernando Berlingeri fue notificado de la aprehensión y dispuso que Galarregui fuera trasladado a Mar del Plata, donde será citado a declarar en los Tribunales, en el marco de la causa que ya ha sido caratulada como “Femicidio”.

La investigación se intensificó el martes por la tarde, cuando un conocido de Rocío entregó un dato crucial a la policía: la ubicación de Grecia y Libertad, que la joven le había enviado antes de desaparecer. Esto permitió a los investigadores enfocar sus esfuerzos en esa zona, donde finalmente, en una casa ubicada en Grecia al 1000, se encontró el cuerpo de Rocío dentro de un freezer. El dueño de la vivienda, identificado como Juan Galarregui, se había dado a la fuga y desde entonces era buscado como el principal sospechoso del crimen.

Rocío Fernández había salido de su casa en Vernet y Güiraldes en la madrugada del sábado, tras encontrarse con un amigo y dirigirse en taxi hacia un sector del Puerto. Luego de eso, no se supo más de su paradero hasta que se halló su cuerpo, ya sin vida, en la vivienda mencionada.

La comunidad de Mar del Plata se encuentra conmocionada por este trágico hecho, mientras las autoridades avanzan con la investigación para esclarecer los detalles de lo ocurrido y llevar al responsable ante la justicia