REFLEXION   

Este domingo 19 de mayo el presidente libertario neo colonialista nos dió otra oportunidad para avergonzarnos ante la mirada internacional exhibiendo  su naturaleza burda e imprudente.
Su impulso injurioso se exacerba con los aplausos y elogios y no sería  raro que sueñe con ser el lider global de un imperio distópico constituido por una masa de pordioseros y la casta de señores neo feudales.
 Entender si le sale naturalmente o lo expone para cubrir con otro escándalo  el fracaso  al que se encamina su gestión, todavía no lo logramos. Lo cierto es que la suerte de este presidente, modelo de tosquedad intelectual y moral, conejilo  experimento  del laboratorio  anarco-financiero puede marcar la suerte en las urnas de la ultraderecha europea.
Tal vez se le ocurrió que un par de insultos a la presidencia española era un gran aporte a la campaña de sus hermanos  de la extrema Anti derechos. La injerencia en asuntos de otros países no es ni tradición argentina ni es correcto; la intromisión menemista ya nos enseñó la gravedad de las consecuencias de asociarnos al imperio gendarme.

Nos mete en otro conflicto a resolver como si no fuese suficiente la vulneración de Derechos constante que vivimos minuto a minuto: despidos, facturas impagables, transporte carísimo e inseguro, mortalidad por falta de medicamentos, familias viviendo en veredas, aumento de robos, la presión usuraria del FMI, los dólares que no aparecen, la entrega de soberanía y otros arrebatos que ejecuta este gobierno ¡a nosotros, a la Argentina, el PAÍS A LA VANGUARDIA DE LOS DERECHOS HUMANO!

Se sumó a la convocatoria española un amigo de la vicepresidenta para mostrar que en la Argentina hay una reserva de pensamiento  retrógrado, misógino y fanático dispuesto a recuperar su status.

La audacia de un genio o de un idiota,  peligroso en cualquier caso, dispuesto a la transgresión por puro placer, demostrando que vino a eso: A ROMPERLO TODO.   Y la factura la pagamos nosotras y nosotros.¿Qué más?
Se merece el JUICIO POLÍTICO.   
REGIONAL AJÓ APDH