Las principales distribuidoras de energía de la provincia de Buenos Aires, especialmente las cooperativas, enfrentan una crisis financiera aguda, marcada por embargos, deudas millonarias y dificultades para cobrar. Entre las cooperativas afectadas por embargos se encuentran Barker, Brandsen, Chacabuco, Las Flores, Luján, Necochea, Olavarría, Villa Gesell y Zárate.

En medio de un contexto de alta inflación, la Federación de Cooperativas de Electricidad y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires (FEDECOBA), que agrupa a 143 cooperativas, ha alertado sobre la imposibilidad de cumplir con las obligaciones para la prestación del servicio público de distribución de energía eléctrica.

Según informes del medio local La Vanguardia, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (CAMMESA) ha iniciado embargos contra cooperativas eléctricas debido a una deuda que alcanzó los $490.925 millones para febrero de 2024. El gobierno nacional ha decidido embargar a nueve pequeñas cooperativas de la provincia, representando el 12% de la deuda total, incluyendo a Barker, Brandsen, Chacabuco, Las Flores, Luján, Necochea, Olavarría, Villa Gesell y Zárate.

La crisis se agrava por los ingresos insuficientes del Valor Agregado de Distribución (VAD), destinado a cubrir los costos de construcción, operación y mantenimiento de la infraestructura eléctrica. Las cooperativas se encuentran en una situación apremiante, incapaces de cubrir sus principales costos operativos, incluyendo la adquisición de energía, la compra de insumos y el pago de salarios, lo que podría desencadenar conflictos económicos y sociales en las comunidades donde operan