El pasado viernes 19 de abril, la fundación Temaikèn respondió a un llamado de emergencia de un particular alertando sobre la presencia de una tortuga cabezona juvenil, de aproximadamente 28 kilos, en el río Luján. El animal presentaba una herida significativa, posiblemente causada por un choque con una embarcación o una hélice.

Tras el rescate, la tortuga recibió primeros auxilios y, al día siguiente, fue trasladada para su tratamiento y rehabilitación en la fundación Mundo Marino, ubicada en San Clemente del Tuyú. Una vez en Mundo Marino, el equipo de veterinarios confirmó la gravedad de las heridas, que incluían lesiones profundas en el caparazón y el cuello, así como una rotura en la mandíbula superior.

El animal permanecerá bajo cuidado constante de los veterinarios y técnicos de la fundación Mundo Marino mientras se recupera. Sin embargo, su pronóstico es reservado debido a la gravedad de las heridas sufridas. Este caso sirve como recordatorio de la importancia de proteger y preservar la vida marina, así como de la necesidad de tomar precauciones para evitar colisiones con embarcaciones que puedan poner en peligro a estas especies vulnerables