miércoles 12 de noviembre de 2025 - Edición Nº2534

Locales | 10 nov 2025

ROTURA DE IMAGENES

Preocupación en San Clemente por reiterados actos de vandalismo en la parroquia local

La parroquia San Clemente Romano volvió a ser blanco de ataques contra imágenes sagradas y objetos de culto. El párroco, padre Julio Aguiar, llamó a la comunidad a mantener la serenidad y continuar unidos en la fe.


La comunidad católica de San Clemente del Tuyú atraviesa momentos de consternación luego de que se registrara un nuevo hecho de vandalismo dentro de la parroquia San Clemente Romano, ubicada en calle 8 entre San Martín y calle 17. El propio párroco, padre Julio Aguiar, informó que el pasado domingo 9 de noviembre se encontraron con la rotura de una imagen religiosa en el interior del templo, hecho que se suma a una serie de episodios similares que vienen ocurriendo en los últimos meses.

“Lamentablemente durante un tiempo hemos sufrido varios vandalismos con respecto a imágenes y objetos de veneración en nuestro templo, lugar de oración y encuentro con el Señor”, expresó el sacerdote en un mensaje dirigido a la comunidad. La semana anterior también había sido dañada la imagen de la Virgen María bajo la advocación de Rosa Mística, lo que causó profundo dolor entre los fieles.

Estos ataques no son hechos aislados. Según detalló el párroco, ya se habían denunciado robos y deterioros dentro del templo: desde dinero de las limosnas hasta velones pascuales, artefactos litúrgicos e incluso una cruz procesional. Para muchos vecinos, la situación representa no solo una agresión a la fe, sino también a un espacio que forma parte de la identidad histórica y cultural de San Clemente.

Cabe recordar que meses atrás también fue vandalizada la imagen del santo patrono ubicada en la entrada del pueblo, a la cual le cortaron los brazos, acto que en su momento generó un amplio repudio comunitario.

A pesar de la tristeza y la indignación, el padre Aguiar llamó a no ceder ante la desazón y reafirmó que las actividades parroquiales continuarán como estaban previstas, entre ellas las celebraciones de confirmaciones y la tradicional fiesta patronal. “Queremos llevar tranquilidad. Seguiremos adelante con fe y esperanza”, expresó.

El episodio vuelve a poner en debate la necesidad de cuidar los espacios comunes y promover el respeto por los símbolos espirituales, culturales y comunitarios, pilares que sostienen la vida social de la localidad.

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