

Durante las noches, la costanera de Santa Teresita se convierte en punto de encuentro de decenas de motociclistas que se reúnen para circular y realizar maniobras, generando una situación que preocupa tanto a vecinos como a visitantes.
El ruido constante de los escapes y las aglomeraciones se han vuelto habituales, alterando la tranquilidad del paseo costero. En las imágenes registradas por testigos se observa cómo patrulleros intentan intervenir para dispersar a los grupos, aunque en algunos momentos la situación se desbordó.
Según se pudo saber, algunos efectivos policiales fueron agredidos con piedras mientras intentaban despejar la zona, lo que obligó a reforzar la presencia de móviles en distintos puntos de la costanera.
Frente a estos episodios, los vecinos reclaman mayores controles y medidas de prevención, ya que aseguran que este tipo de situaciones se repite noche tras noche, especialmente durante los fines de semana.