

El 1° de enero de 2024, Tomás Tello, de 18 años, fue asesinado en Santa Teresita. Casi dos años después, la causa que investiga su muerte fue elevada a juicio, y siete jóvenes enfrentarán el proceso judicial en el Tribunal en lo Criminal N°2 de Dolores, presidido por el juez Antonio Severino.
Según fuentes judiciales, la fiscalía tendrá 10 días hábiles para presentar las pruebas que utilizará en el debate oral, seguido por la querella y, finalmente, las defensas. Luego se realizará una audiencia para definir los elementos que serán admitidos en el juicio y se fijará la fecha de inicio del debate.
Cinco de los imputados continúan detenidos: Nicolás Roberto Ochoa (27) y Damián “El Kope” Kopelian (21) en la Unidad Penitenciaria N°6 de Dolores; Federico Gonzalo Brandán (22) en la Unidad Penitenciaria N°9 de La Plata; Carlos Amestoy (29) en la Unidad Penitenciaria N°5 de Mercedes; y Lucas Carrillo (18) en la Unidad Penitenciaria N°37 de Barker. Kopelian está acusado de homicidio agravado; Brandán, Ochoa y Amestoy como partícipes primarios necesarios; y Carrillo como partícipe primario. Todos permanecen con prisión preventiva desde febrero de 2024.
Dylan Morel (18) y Alexis González (18), imputados como partícipes secundarios, llegarán al juicio en libertad. Aunque inicialmente se les negó la excarcelación, la Cámara de Casación les concedió el beneficio al considerar que no habrían atacado directamente a Tello. Sin embargo, ambos tienen prohibido salir del país y del Partido de la Costa, y deben presentarse dos veces por semana ante el Tribunal, mientras un recurso pendiente podría modificar esta decisión.
El arma homicida nunca fue encontrada, aunque las pericias confirmaron que el ataque se produjo con un cuchillo de más de cinco centímetros.
Tras la elevación a juicio, Samanta Ferreyra, madre de Tomás, expresó su esperanza de que el proceso permita finalmente hacer justicia. “Para mediados de este mes vamos a tener respuestas”, aseguró