

La Selección Argentina femenina de beach handball hizo historia en Chengdu al consagrarse campeona por primera vez de los Juegos Mundiales. En una final vibrante, Las Kamikazes derrotaron 2-1 a Alemania, destronando a las últimas campeonas y bicampeonas mundiales para colgarse la medalla de oro.
La costera Giuliana Gamba formó parte del plantel que alcanzó esta histórica conquista, aportando su solidez defensiva a un equipo que se destacó por su carácter y juego colectivo de alto nivel.
El duelo decisivo tuvo todos los condimentos: Alemania se llevó el primer período por 14-20, pero Argentina reaccionó con autoridad en el segundo, ganando 22-12 y forzando el shootout. En el desempate, las dirigidas por Leticia Brunati arrancaron con una racha perfecta que las puso 4-0 arriba, ventaja clave en una modalidad donde cada gol vale oro. El marcador final del desempate fue 7-2.
El camino al título fue impecable: victorias en fase de grupos ante Portugal, Croacia y China (todas por 2-0), triunfo en cuartos de final frente a Vietnam (2-0) y una semifinal electrizante contra España, resuelta en penales (2-1).
Con esta conquista, Las Kamikazes suman su primer oro en Juegos Mundiales, después de una plata y un bronce en ediciones anteriores, confirmando que el beach handball argentino está en la cima del mundo.