

En un nuevo aniversario del Día de la Independencia, la Plaza Itatí se convirtió en escenario de una emotiva jornada comunitaria organizada por los Misioneros de Francisco y los servidores de la Capilla Ceferino Namuncurá. La actividad central fue un guiso popular compartido con vecinos y vecinas, gesto que simboliza el compromiso por una patria más fraterna e inclusiva.
El evento contó con la presentación del grupo de danzas folclóricas Raíces Argentinas, que con su baile homenajeó nuestras raíces culturales y animó la celebración con el color y la alegría de nuestras tradiciones.
Durante la jornada, también se realizó la difusión de la Red Infancia Robada del Foro de Chascomús, un espacio que trabaja activamente en la defensa de los derechos de niñas, niños y adolescentes, mostrando que el compromiso con la justicia social forma parte del camino de fe.
Como símbolo de unidad y esperanza, entre todos los presentes se embelleció la ermita de la Virgen en la plaza, renovando su imagen con fervor patriótico. Fue un momento de recogimiento y expresión espiritual que dejó en claro que el amor a la Patria se vive también en los pequeños gestos cotidianos y en la organización solidaria.
El mensaje fue claro y profundo:"Viva la Patria, viva la Virgen. Otro mundo es posible."
Una consigna que resume el deseo compartido por una Argentina más justa, solidaria y profundamente humana.