

Este fin de semana largo que sorprendió a muchos por su sorpresiva inclusión en el calendario trajo consigo un fenómeno aún más inesperado: el clima “veraniego” que se instaló en la Costa Atlántica bonaerense en el otoñal mes de mayo.
Con temperaturas que superaron los 20°C, un cielo despejado y ausencia de vientos, las playas de la costa atlantica se vieron con buen numero de visitantes que, aunque no esperaban tanto calor, no dudaron en descalzarse y meterse al mar.
Las reservas hoteleras no llegaron a promediar un 40%, con mejores cifras en hoteles de mayor categoría, elegidos por quienes podían permitirse un descanso fuera de temporada. Si bien la ocupación no alcanza los niveles de un feriado tradicional, el buen clima y la posibilidad de una escapada breve atrajeron a muchos a recorrer las playas, especialmente residentes que aprovecharon el día no laborable en escuelas y oficinas públicas.